El fin del reinado de Juan Carlos empañado por los casos
El anuncio de la abdicación del rey Juan Carlos no constituye que una media sorpresa, ya que la monarquía española se ha visto sacudida, estos últimos años, por la multiplicación de asuntos que han empezado, con su credibilidad, su popularidad. Más del 60% de los españoles estaban a favor de la marcha del soberano, en enero, exasperados por las aventuras financieras e íntimas de la familia real.
Una hija y su yerno sospechosos de malversación de fondos
La acusación de Cristina, la segunda hija de Juan Carlos llamó en enero, al fin de la inmunidad de la familia real. La Infanta es sospechosa para la justicia española de haber colaborado con su marido, el antiguo campeón olímpico de balonmano Iñaki Urdangarin, en un caso de malversación de 6,5 millones de euros de fondos públicos.
Si ella ha mantenido durante mucho tiempo su inocencia, durante su audiencia, en febrero, afirmando que tenía «toda confianza» en su marido, acusado en diciembre de 2011, ella no obstante ha perdido popularidad en el seno de la población española en esta ocasión.
El caso había empujado la rica monarquía a hacer pública la gestión de sus cuentas, difundiendo de manera especial por la primera vez el salario del rey (292.752 euros).
Una dolorosa partida de caza al elefante en Botswana
En abril 2012, España sufre de lleno el latigazo de la crisis y Juan Carlos se encuentra en el hospital. Él no está enfermo sino curando una de sus heridas más dolorosas para su popularidad, heredada de una costosa partida de caza al elefante en Botswana.
Operado de la cadera, se tiene que poner una prótesis y condenado a comprarse una conducta. Toda España le ha visto en la presa, posando, fusil en mano, cerca de un elefante muerto, foto de archivo de un organizador de safaris a 45.000 euros el viaje.
El rey se vio obligado a pedir disculpas públicamente. «Me he equivocado y no volverá a ocurrir», declaro él, con el rostro serio, mientras que los recuerdos de sus otras partidas de caza, implicando la muerte de especies protegidas, se desenterraron por la prensa.
Una fortuna que molesta
¿De dónde Juan Carlos saca su fortuna, estimada en 1,8 billones de euros? La pregunta, planteada por el New York Times en septiembre 2013 sacudió la monarquía que venía de aceptar de hacer entrar en la ley la publicación de sus cuentas. «Durante años, ha acumulado yates, una isla-casa, coches de lujo que se añaden a su inmensa colección de automóviles», escribió así el periódico americano.
Incluso cuando el rey hizo públicamente un gesto para deshacerse de una parte de su imagen de lujo conseguir deshacerse de parte de su imagen de lujo, él derrapa. Durante el verano 2013, anunció que se separaba de su yate Fortuna… Pero aparecían nuevas críticas tras la revelación de indemnizaciones pagadas por despidos a los empleados que trabajaban. Montante: 1,2 millones de euros, a costa de los contribuyentes españoles.
¿Una amante alemana?
A las escapadas financieras de Juan Carlos se añaden sus aventuras íntimas. El rey es conocido por ser un gran corredor de faldas. Por otra parte la existencia de dos hijos ilegítimos, de los cuales uno nació antes del príncipe Felipe, quién lo sucederá en el trono, el último rumor acerca de Juan Carlos relacionado a una aventura extraconyugal un poco más visible que los otros, según algunos periodistas.
Corinna zu Sayn-Wittgenstein, antigua esposa de un príncipe alemán, jugando a las mediadoras en el mundo de los negocios, aparece en numerosas ocasiones a su lado sería “la amiga íntima” de un rey cuyo matrimonio con la reina Sofía está a menudo considerado un «desastre».
Artículo traducido por Elizabeth Núñez