Si hubiese que elegir un país para representar los momentos que estamos viviendo políticamente, especialmente en algunos países europeos como España, Reino Unido y algunos más que no preciso nombrar en tiempos convulsos dominados por la globalización. Sin duda alguna dentro de este panorama sería Italia. Un país que un día , junto con Grecia fue la cuna de la cultura europea, el origen de las fuentes principales bases del Derecho, muchas de las cuales aún tienen vigencia en la actualidad.
Y no sólo en eso sino en claro ejemplo de las desigualdades norte y sur, los sentimientos centrifugos y centrípetos o el creciente desapego de la ciudadanía por los asuntos públicos.
En España, llevar ya seis años sin políticas de calado, especialmente por la culpa de algunos egos políticos, que no voy a nombrar que apenas conocen el verdadero arte de la política.
Desde aquí plantean que las tensiones geopolíticas y la incertidumbre retroalimentan los temores que empujan a la recesión no sólo en Estados Unidos, sino en Europa. Una “recesión geopolítica” de resultados imprevisibles. Estamos ante un claro riesgo que oleadas populistas retornen a momentos anteriores a la gran crisis del 2008.Algunos analistas esperan que retroceda la oleada “populista” y se restablezca la normalidad pre crisis de 2008. Pero los fenómenos como la presidencia de Trump, Bolsonaro o el Brexit, o el estado fluido de los sistemas políticos democrático burgueses como el de Italia, o la inestabilidad de gobierno en España, son los síntomas más visibles de que estos tiempos turbulentos llegaron para quedarse.
Las recesiones suelen activarse por un deterioro de las expectativas que lleva a las empresas a reducir la inversión y a las familias a recortar la compra de bienes duraderos. En el PIB ultimo, la inversión empresarial en bienes de equipo cayó, al igual que la inversión en vivienda y las compras de coches de las familias. En el caso de las empresas, los salarios llevan años sin crecer a pesar de la productividad . Y la guerra comercial de Trump ha frenado sus exportaciones el pasado año.
Y en el panorama político errático e impredecible que hará realidad un peligro muy serio para el año 2020 si la tasa de paro empieza a subir y puede acabar generando más incertidumbre y provocar más caída de la inversión y el consumo privado. Veremos donde termina esta política errática de conflictos y egolatrías diversas. La clave está en la mano del temido huracán llamado Brexit que puede provocar la demostración de las políticas erráticas y de eso que llaman nueva política…..
*José Luis Ortiz, funcionario