La paciencia del pescador
la suerte del principiante
la confianza del amigo
la conformidad de una madre
la imaginación de un niño…
Para recorrer la playa
de Este a oeste
de arena a agua
y recoger tesoros
que el mar escupe.
Los lunes deja restos de despedidas
y también flores.
Los martes arrastra olor a oficina
y a mejillones.
Los miércoles empuja sueños
y piedras de colores.
Los jueves acerca ecos de risas
y efímeras espumas.
Los viernes llegan versos perdidos
y caracolas gigantes.
Los sábados traen nuevas parejas
y alianzas rotas.
Los domingos hay trazas de piras
y botellas sin mensaje.
Yo lo aprovecho todo
lo engarzo en collares
preparo el menú
vendo al peso el oro
publico libros de poemas.
Y escucho el mar si viajo
cuando me adentro en tierra
y pierdo la paciencia
y dejo de tener suerte
y olvido la confianza
y ya no me conformo
y no imagino nada.
Entonces me duermo
con una caracola en la oreja.

