“Microrelatos”
EL TENSIOMETRO DE “SABER VIVIR”
Aún recuerdo cuando allá por el siglo pasado yo tenía antena de televisión y el televisor estaba encendido a todas las horas aunque nadie lo viera. Había un programa de consejos médicos y hábitos saludables (que no hacen al monje) de un doctor (?) con sonrisa de mirar a cámara pero a mí no me engañaba tras esa falsedad se ocultaba esa mala leche que no puede disimularse.
En aquel programa anunciaban un tensiómetro, o sea, un aparato para tomarse uno mismo la tensión en casa (sin tener que dar la brasa a todas las horas a ningún doctor con tus hipocondrías). A mí me parece que el concepto ” tensiómetro casero ” es del todo incompatible con la expresión “saber vivir” porque cómo se puede vivir (disfrutar de la vida) si estás todo el tiempo obsesionado con tomarte la tensión. Y qué es la vida para muchos sino “vivir en tensión”.
Hay demasiada gente que parece que no vive si no va al médico un día sí y otro también. Enfermos imaginarios que acaban enterrándonos a todos. Que ni viven ni dejan vivir.
Por cierto, este hombre… ¿sigue entre nosotros o ya pasó a mejor vida?