Una vez viví en un país que gritaba libertad, que respiraba libertad, y para ello es necesario, para que viva que se alimente de verdad y justicia, que es lo que está muriendo y con ello se está muriendo la libertad y está despertando la manipulación y la represión en todas sus formas.
Lo que llamamos democracia ahora encierra una falsedad y una injusticia tremendas: los trabajadores están al servicio de los bancos en lugar de los bancos al servicio de los trabajadores, y de esos invisibles poderes que nos controlan desde las alturas.
La opinión pública está influida por los medios de comunicación y los medios están controlados por los que nos mandan y los que nos dirigen favorecen a los que dicen lo que a ellos les conviene y borran todo lo que no les conviene, no cito nombres porque no es necesario y todos los tenemos en mente.
Está todo muy bien tramado para dominar, para que no tengamos una democracia y para que no mande el pueblo. Está todo muy estudiado, desde la enseñanza hasta los medios de difusión y la publicidad.
Y cuando eso falla, siempre quedan alternativas como lo estamos viendo en estos momentos. Ahora la famosa marca España es más bien un borrón irreconocible de lo se preveía hasta ahora y todo ello por una gestión irresponsable, nefasta, y todos los calificativos que queramos poner que en estos momentos puede ser irreversible y me refiere al lamentable acontecimiento en Cataluña.
Señor Rajoy, pienso honestamente que tendría que plantear unas nuevas elecciones, y antes de ello por dignidad presentar su dimisión, por negligencia. Unos daños irreparables en el corazón de millones de ciudadanos decepcionados, un daño irreparable en la economía de la que usted tanto se glorificaba, una falta de reconocer la realidad ya que usted está en el olimpo de la Moncloa y le cae muy alejada la realidad.
Reconozco que en plena libertad no vive nadie. Pero la clave de la libertad es la libertad de pensamiento. Sin libertad de pensamiento no hay pensamiento crítico. Y para criticar se precisa libertad que es lo que alguna forma se intenta controlar, si bien no reprimir y mido mis palabras.
Mi grito en estos momentos es el siguiente: lo importante es vivir, que hay que vivir, y para ello es vital ser libre lo que implica tener el pensamiento libre y que se eduquen a las personas para tener el pensamiento libre y que con ese pensamiento se vayan construyendo a sí mismos y es lo que no ha hecho, ni hacen y lo peor que ahora retornar a tiempos pasados cuando los trajes de la autoridad pintaban de gris…….
(*) José Luis Ortiz Güell, funcionario