En el 14 de Abril de 2023
Loís F. Rodríguez Vázquez
A.R.G.A.

Estimados amigos. Permitidme que, en primer lugar, aún fuer de parecer poco protocolario, que os agradezca vuestra presencia en este acto en un día, como hoy, en el que las condiciones meteorológicas invitarían a estar en cualquier otro sitio diferente de esta explanada, de triste recuerdo. Pero está claro que muchos y, sin duda, todos los presentes, consideramos un deber concentrarnos aquí para honrar la memoria de cuántos de nuestros camaradas perdieron la libertad, también su vida en tantos casos, por ejercer de constructores y defensores de un sistema político, de un modelo de Estado, la Republica, que ponía la dignidad de los ciudadanos por encima de cualquier otra cuestión. Gracias, amigos y amigas.
Sea, en segundo lugar, mi obligado agradecimiento a la Directiva del ARGA, y su Presidente, Sr, Alvajar, por considerar, un año más, a la persona que os habla, como digna y competente, para dirigirse a todos vosotros en este día, para honrar la memoria de los republicanos españoles y al modelo de Estado que pusieron en marcha y mantuvieron entre 1931 y 1939, Guerra Civil por medio. Gracias compañeros, gracias Alvajar.
Porque eso fueron quienes hoy honramos en este lugar, de infausto recuerdo, de crueldad y muerte, Que conocemos como El Campo de la Rata, al creer firmemente que el régimen monárquico debía ser superado y que la Republica era el modelo de Estado que podía permitir dar ese paso delante que la sociedad y el Estado español precisaban en aquel momento. Haciendo mías, nuestras, las palabras de nuestro presidente en la convocatoria a este acto, que nos ha sido enviada, quiero reconocer la labor de aquellos hombres y mujeres que dieron lugar, con una fe inquebrantable en sus ideales, fueron capaces de producir en España profundas transformaciones en todos los aspectos ya fuesen sociológicos, educativos, de emancipación de la mujer, de la transformación de las relaciones laborales, del arte, de la laicización del Estado, de la valoración de la adquisición de conocimiento como vía de la emancipación de los ciudadanos. No sé si seremos capaces de llegar a honrar, como se merecen, todos aquellos hombres y mujeres que hicieron posible la instauración de la II República española.
En la actualidad la acción y experiencia de quiénes nos reconocemos como republicanos, al menos de modo organizado como tales y colectivamente, no va más allá, por desgracia, de la organización de actos como éste y algún puñado más, en reconocimiento de la II República y los republicanos. Pero ante nosotros, tal como se dice en la convocatoria de este acto, se está produciendo, no sólo un silenciamiento de aquella época sino, yo diría un esfuerzo de reescritura de la historia de España en aquellos años. Algo que los republicanos no deberíamos permitir.
Para ello no basta con que nos quedemos atónitos ante el espectáculo, sino que debemos pasar a la acción. Esa acción debería comenzar por plantearnos y tratar de dar respuesta a algunas consideraciones fundamentales. La primera, ¿podemos plantear en este momento la cuestión del modelo de Estado o, como se consideró a la muerte del dictador Franco, en el periodo constituyente conocido como Transición, que ahora, cuarenta y ocho años después, tampoco toca, tampoco es momento, tampoco es conveniente, incluso que ya no es necesario porque el actual modelo, la monarquía parlamentaria, como ya dicen algunos, sea el modelo ideal para el Estado español? Somos muchos los que no estamos de acuerdo con esta interpretación, pero debe ser planteada si pretendemos que el republicanismo siga vivo porque consideramos que tiene sentido y que es un modelo de organización del Estado superior.
En segundo lugar, ¿Existe un pensamiento republicano? Un modelo de pensamiento que permita elaborar una filosofía política con la que abordar el análisis de la realidad y plantear las transformaciones sociales y políticas que consideramos necesarias. Si este pensamiento existe, y yo estimo que existe, qué antecedentes tiene en la tradición española, qué importancia hemos de dar a las aportaciones de la tradición republicana española en la construcción del pensamiento republicano actual. Es imprescindible hacer ese estudio de búsqueda y recuperación del pensamiento republicano, que constituya la base, el fundamento, para el desarrollo de una filosofía política republicana que sistematice nuestra acción y experiencia.
Y, en tercer lugar, deberíamos plantearnos ante la existencia de un solo partido político en el panorama español, que se define como republicano, cuyo fundamento es el republicanismo, como es Esquerra Republicana de Cataluña, la necesidad, la bondad, la conveniencia histórica de plantear, fomentar, realizar constituir formaciones políticas, que operen en el Estado español, que tengan el republicanismo como fundamento y pretendan la Republica como modelo de Estado.
No se tomen estas cuestiones como respuesta, sino como preguntas imprescindibles para decidir si el republicanismo español tiene sentido y, sobre todo, si tiene posibilidad de convertirse en sujeto operatorio de la acción y experiencia de la política española.
Y en esta tarea, ingente tarea, sea el Ateneo Republicano de Galicia, la casa común de los republicanos y el republicanismo que han de realizar este trabajo.
Salud. He dicho.
En A Coruña, a 14 de Abril de 2023